Publicado en El Puerto Actualidad Si algo ha caracterizado a España en la última década ha sido un modelo de crecimiento basado en el ladrillo que está en la base de muchos de los problemas económicos de la actualidad. Desde que Aznar aprobara en 1998 la Ley de Suelo, el boom de la burbuja inmobiliaria, cimentada en la abundante financiación la banca privada, provocó que entraran grandes cantidades de dinero a las arcas de las administraciones públicas que sólo tenían que recalificar terrenos y esperar a que las constructoras llamasen a tu puerta dispuestos a compartir contigo los beneficios del libre mercado. Pero en el 2008 estalló una crisis de crédito internacional y los bancos cerraron el grifo, la burbuja inmobiliaria explotó, el sector de la construcción se frenó en seco y el margen de negocio de muchas empresas desapareció. Las administraciones veían cómo el dinero que entraba por sus puertas se reducía de forma drástica año a año esfumándose cualquier posibilidad de in...