Artículo publicado en Viva El Puerto
El titular de este articulo, que parafrasea a una mítica película de humor de los años ochenta, puede tener varias referencias: la situación de los servicios públicos municipales, algunos indicadores económicos que han tocado máximos históricos en este mandato, pero en esta ocasión me refiero a los más literal. Veamos algunos ejemplos:
En julio del año pasado, una rotura de las canalizaciones de aire acondicionado del ayuntamiento inundó el pasillo de las oficinas de los grupos municipales, inutilizando varias de ellas hasta bien entrado el mes de septiembre. En octubre, se cayeron varias placas de mármol y unas cornisas de la fachada -afortunadamente sin causar daños ni víctimas- y desde entonces la entrada principal esta cerrada con vallas.
Hace unos días llegó a las redes sociales de IU El Puerto una serie de fotografías que mostraban el estado de los cuartos de baño de la Biblioteca María Teresa León. La persona que nos las envió, usuaria diaria de esa biblioteca, alertaba de que solo estaba operativo un baño y que poco a poco se fueron estropeando sin que nadie pusiera remedio.
Poco después colectivos como la Flave denunciaron las deficiencias de otros edificios municipales: los cuartos de baño del Teatro Municipal Pedro Muñoz Seca, los exteriores del Centro de Mayores Francisco Guerrero o el Centro Cívico Augusto Tolón. A lo que hay que sumar la Comisaria de la Policía Local, denunciada incluso en inspección de trabajo.
Todo esto no es causal. Los edificios se estropean por su uso o por las inclemencias del tiempo, esto no es culpa del ‘gobierno de los preparados’. Pero el mantenimiento y el arreglo sí es su responsabilidad y de eso poco se ha hecho estos cuatro años. Si las cosas no se cuidan y no se mantienen se estropean. Los edificios también.
Una vez más, desde Izquierda Unida hemos puesto soluciones encima de la mesa: un plan de choque de mantenimiento y reparación de edificios municipal, que haga un inventario detallado del estado de las instalaciones y prepare un calendario de actuaciones para corregir estos desperfectos. No olvidemos que al final son los ciudadanos y las ciudadanas las que se ven afectadas por la incapacidad de gestión del gobierno de Beardo.
Afortunadamente los portuenses tendrán la oportunidad en mayo de acabar con la deriva decadente en la que Beardo y el Partido Popular han sumido el ayuntamiento y cambiar con su voto el rumbo de nuestra ciudad.