Ir al contenido principal

Un Ayuntamiento al servicio de la gente

Artículo publicado en El Puerto Actualidad
 
El pasado miércoles vivimos el primer episodio de aquella batalla de los ayuntamientos a la que hacía mención en un artículo publicado en este mismo medio a finales de julio. El gobierno municipal convocó un pleno extraordinario para dar cuenta a la ciudadanía del requerimiento presentado por el Ministerio de Hacienda el pasado 1 de octubre en el que instaba al Ayuntamiento de El Puerto a acogerse o no a un Fondo de Ordenación con el que poder liquidar la deuda comercial con proveedores, que alcanza los 19 millones de euros (FCC, Urbaser y Recolte fundamentalmente).

Este anticipo de financiación ofrece condiciones financieras más favorables que las actuales pero, a cambio, el Ministerio impondría nuevas medidas de ajuste: reducir un 5% el capítulo de personal y los servicios municipales; aumentar en un 5% las tasas municipales de mercado, cultura, cementerio, teatro, fomento y participación ciudadana; subir el IBI; y suprimir las bonificaciones fiscales y todas las subvenciones municipales a asociaciones, clubes o hermandades. A todo esto se sumaría la obligación de someter a aprobación el presupuesto municipal anualmente al Ministerio de Hacienda, quién tendría la última palabra sobre las cuentas municipales.

De no acogerse, el Ministerio podría retener parte de la Participación en los Impuestos del Estado (PIE), lo que terminaría con la autonomía del Ayuntamiento para gestionar su política económica, y por tanto, con su capacidad para hacer política.

Así pues, el gobierno municipal se enfrentaba a una elección trampa: acogerse al plan asumiendo nuevas políticas de recorte y sometiendo los presupuestos al control de Ministerio, o no acogerse y ser “intervenidos”. En definitiva, sucumbir al dogma de la austeridad y al modelo neoliberal de una u otra forma, aunque suponga terminar con la autonomía local, empeorar los servicios municipales y seguir cargando las consecuencias de la crisis sobre las espaldas de los/as portuenses.

El equipo de gobierno optó por no acogerse y romper con la espiral de deuda que ya denunciara el edil de Izquierda Unida Antonio Fernández allá por 2013. Mientras, los concejales y concejalas del Partido Popular, culpables directos de la gestión que ha llevado al Ayuntamiento al borde del abismo tras ocho años en el gobierno, 147 millones de euros de deuda y un periodo medio de pago a proveedores que cuadruplica lo establecido por la ley, ni siquiera emitieron voto. Ni a favor, ni en contra, ni abstención. Nada, sólo silencio. Incapaces de decidir si apoyaban las medidas que su partido impone desde Madrid (apoyadas por su actual portavoz Alfonso Candón, ausente en este pleno) o los intereses de la gente de El Puerto.

Rescato una frase que pronunciara el Coordinador General de IU Andalucía Antonio Maíllo en su última visita a El Puerto: necesitamos ayuntamientos al servicio de la gente, no al servicio del Ministerio de Hacienda. El miércoles quedó claro qué quiere, qué defiende y a quién obedece cada partido.

Entradas populares de este blog

“Mi reto es dejar terminadas todas las cuestiones pendientes y llevarlas a buen puerto”

Entrevista publicada en El Puerto Actualidad Tras la dimisión del concejal de Izquierda Unida, Antonio Chacón, desde su formación ya han trasladado la renuncia del edil a la Junta Electoral y se encuentran a la espera de que la nueva credencial de José Luis Bueno llegue al Ayuntamiento y poder tomar el relevo en las áreas de Comercio, Medio Ambiente y Playas. José Luis Bueno, licenciado en Filología Francesa y con un Máster en Formación de Profesorado, ha sido el responsable de la organización local de Izquierda Unida durante cuatro años. Pese a que en la lista electoral iba en la séptima posición, ejercerá el cargo de concejal debido a que sus compañero que iban en los puestos anteriores han tenido que renunciar por motivos personales y laborales. Pregunta: ¿Cuál sería su balance del tiempo de legislatura del actual equipo de gobierno? Respuesta: En general de todas las áreas que lleva Izquierda Unida, hicimos un balance anual y un balance de los dos años y me

El PCF, la hoz y el martillo

Ayer corría como la pólvora por la redes sociales la noticia de que el PCF abandonaba definitivamente la hoz y el martillo como símbolos del partido. Así lo recogí en este blog , resaltando definitivamente , porque como bien comentó mucha gente el PCF eliminó la hoz y el martillo de su logo en 1996 . L'Humanité lo hizo unos años antes. Para clarificar el debate hay que decir que el último congreso del PCF ha sustituido la hoz y el martillo de los carnets de militantes por el logo del Partido de la Izquierda Europea (cuyo Presidente es el reelecto Secretario Nacional del PCF Pierre Laurent), sin consulta previa a la militancia ni al Comité Nacional del partido. Antiguo carnet de militante del PCF con la hoz y el martillo abajo a la derecha Nuevo carnet de militante del PCF. La hoz y el martillo se sustituyen por el logo del PIE En cualquier caso, y como comentaba ayer, los símbolos son sólo símbolos y a la vez son parte de la idiosincrasia y de la iden

Cataluña y el 1-O

Publicado en El Puerto Actualidad El 1 de octubre habrá referéndum en Cataluña . Es sin duda el tema estrella de estas últimas semanas y está centrando los titulares de los periódicos estatales, las tertulias de televisión etc desde que el Parlamento de Cataluña aprobase su convocatoria. Son muchos los debates y las opiniones sobre si apoyar el referéndum y participar en el 1-O o no hacerlo. Vaya por delante que este es un tema sobre el que tengo muchas dudas y contradicciones, pero más allá de planteamientos sobre garantías, sobre quién lidera realmente el procés , el papel de la burguesía catalana, el PDeCAT y la corrupción, o la salida final que vaya a tener esto, tengo claro que hay ciertas cosas que los demócratas no podemos permitir . El Gobierno del Partido Popular, parapetado tras la Fiscalía del Estado y la Guardia Civil, está cometiendo atropellos a las libertades democráticas en Cataluña que nos equiparan a la Turquía de Erdogan: se han prohibido actos de apo