Artículo publicado en Viva El Puerto SUMAR y el PSOE han firmado un acuerdo para reeditar el gobierno de coalición progresista durante los próximos cuatro años. Es una buena noticia por varios motivos: porque aleja el fantasma de la repetición electoral, cierra la puerta del ejecutivo central a la derecha extrema y la extrema derecha, y garantiza seguir avanzando en la agenda de derechos sociales laborales para la clase trabajadora. Sin duda, el anterior acuerdo firmado en 2019 entre el PSOE y Unidas Podemos ha sido muy positivo para la sociedad española en su conjunto, rompiendo con años de políticas de austeridad y recortes y afrontando la pandemia desde la protección social de las personal que más lo necesitaban. Pero también es cierto que quedaron cuestiones pendientes que ahora se deben afrontar junto a nuevas medidas que respondan a las expectativas y las necesidades de la ciudadanía. El nuevo gobierno de coalición deberá estar a su altura. El acuerdo recoge importantes medidas
Publicado en Mundo Obrero Comenzaba Daniel Bernabé uno de sus últimos artículos que "un país no puede estar discutiendo permanentemente sobre quién es, pero tampoco construirse en contra de las partes que lo componen" . Tiene razón, pero discutir quiénes somos y cómo nos organizamos parece ser algo que nos apasiona y enerva a partes iguales. España es un concepto líquido, cambia según el espacio, el tiempo y, sobre todo, la posición que se ocupa en el espectro político. Partimos de dos evidencias fácilmente asumibles: que el modelo territorial del Estado no está cerrado y que, salvo para los más fervientes defensores de la España en blanco y negro del NODO, vivimos en un país social, cultural y lingüísticamente diverso. Ambas evidencias son piezas de un puzzle que buscan encajar sin terminar de cuadrar. En la búsqueda del modelo que mejor estructure el reparto del poder político sobre el territorio y el reconocimiento a la diversidad lingüística, social y cultural de los dif